sábado, 30 de enero de 2010

La falsa inscripción bíblica del siglo X a.C.


¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡La arqueología ha probado que la Biblia se escribió siglos antes de lo que hasta ahora postulaban algunos incrédulos! ¡Aleluya! ¡Aleluya! ¡La ciencia ha confirmado que el bíblico Reino de Israel, el de Salomón y David, existía en el siglo X antes de Cristo (aC)! Y, cómo no podía ser menos, la noticia la han dado prestigiosos medios de comunicación. No en vano, la información procede de la Universidad de Haifa, y la nota de prensa -titulada "Descifrada la más antigua inscripción bíblica hebrea"- ha sido rebotada nada menos que por Eurekalert!, el servicio de noticias de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS). Entiendo la entrega acrítica de The Jerusalem Post y Haaretz, pero no la de otros medios sin intereses políticos en el asunto como la revista National Geographic y el sitio ScienceDaily. Vayamos con los hechos, de los que por estar de vacaciones me enteré ayer a media tarde con días de retraso.

El arqueólogo Yosef Garfinkel, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, desenterró en 2008 en Khirbet Qeiyafa, cerca del valle de Elah, un trozo de cerámica de 15 centímetros de altura por 16 de anchura con una incripción en tinta que dató hacia el siglo X aC, la época en la que según la tradición judía existió el bíblico Reino de Israel. El asentamiento de Khirbet Qeifaya está siendo excavado por la Universidad Hebrea de Jerusalén, cuyos expertos lo consideran un enclave fortificado de tiempos de David y lo identifican con la ciudad de Saaráin citada tres veces en la Biblia: Josué 15, 36; 1 Samuel 17, 52; y Crónicas 4, 31. Los responsables de los trabajos destacan que en la zona tuvo lugar "una de las batallas más famosas de la Historia, la batalla entre David y Goliat".

Un año después del hallazgo del fragmento de cerámica, el historiador Gershon Galil, jefe del Departamento de Estudios Bíblicos de la Universidad de Haifa, asegura haber descifrado la inscripción y que se trata del primer texto bíblico conocido: "Esto indica que el Reino de Israel ya existía en el siglo X aC, y que al menos algunos de los textos bíblicos fueron escrito cientos de años antes de lo que creían los investigadores hasta ahora". No es ninguna tontería. A excepción de ese trozo de cerámica, todas las pruebas arqueológicas conocidas apuntan a que el Reino de Israel bíblico es una ficción, a que en el siglo X aC Jerusalén era una aldea, a que Salomón y David -de existir- fueron caudillos tribales y a que el Antiguo Testamento se redactó en tiempos de Josías (639-609 aC) con fines propagandísticos, para dotar de un pasado glorioso al pueblo judío. ¿Echa un trozo de cerámica por los suelos décadas de arqueología seria? Veámoslo.

La traducción de la inscripción de Galil dice aproximadamente (entre corchetes, texto supuesto):

1 ... no hagas [eso], pero adora al [Señor].
2 Juzga al es[clavo] y a la viu [da] / Juzga al huer[fano]
3 [y] al extranjero. [Re]za por el niño / reza por el po[bre y]
4 la viuda. Rehabilita [al pobre] a manos del rey.
5 Protege al po[bre y] al esclavo / [apo]ya al extranjero.

Según Galil, "este texto es una declaración social respecto a los esclavos, las viudas y los huérfanos", en la que se utilizan palabras y referencias exclusivas de la cultura hebrea. "Incluye elementos sociales similares a los encontrados en las profecías bíblicas y muy diferente de profecías escritas por otras culturas para la glorificación de los dioses y el cuidado de sus necesidades físicas", sostiene el experto, quien sostiene que la inscripción tiene un contenido equiparable al de Isaías 1, 17; Salmos 72, 3; Éxodo 23, 3 y otros fragmentos bíblicos. Eso le lleva a concluir que "resulta muy razonable sostener que en el siglo X aC, durante el reinado del rey David, hubo autores en Israel capaces de escribir textos literarios e historias complejas como las de los libros de los Jueces y Samuel".

A primera vista, no me parecía que del texto pudiera deducirse ni que el glorioso Reino de Israel existiera hace 3.000 años ni que estuviéramos ante una "inscripción bíblica hebrea"; pero yo sólo soy un periodista. Por eso, decidí ponerme en manos de expertos de mi confianza y escribí sendos mensajes de correo electrónico a Israel Finkelstein y Ze'ev Herzog, miembros del Instituto de Arqueología de la Universidad de Tel Aviv a quienes manifesté mis dudas abiertamente. Les dije que no veía nada en la traducción que probara la existencia del Reino de Israel y que tampoco entendía lo que lleva a Galil a concluir que estamos ante un texto bíblico, ya que el supuesto parecido con fragmentos del Antiguo Testamento no prueba nada porque los escribas de tiempos de Josías bien pudieron tradiciones anteriores en la línea de esta inscripción cuando redactaron la Biblia. Todo eso suponiendo que la información que había trascendido fuera cierta, claro. Y les pedí su opinión sobre el hallazgo y lo que se estaba diciendo en los medios.

Finkelstein, coautor del libro La Biblia desenterrada, fue contundente en su respuesta: "Mi interpretación del yacimiento de Khirbet Qeiyafa es muy diferente de lo que se lee en los periódicos últimamente. No creo que los hallazgos reflejen en modo alguno el Reino de Judá; no creo que ese asentamiento de la Edad de Hierro estuviera fortificado; la identidad de sus pobladores tampoco está clara; probablemente estaban sometidos a los poderosos filisteos de la cercana Gat; su nombre de tiempos bíblicos probablemente seguirá siendo un enigma (es decir, no podemos identificar la aldea con la Saaráim bíblica); el ostracon -fragmento de cerámica con texto- protocananeo es parte de un grupo de inscripciones similares que se encuentra sólo en la Sefelá -tierras bajas- y en la llanura costera del sur (nunca se ha encontrado una en Judá) y, por tanto, pertenece a ese entorno cultural. El lenguaje del ostracon está más allá de mi especialidad".


La traducción del texto

Herzog me explicó, por su parte, que "las fortificaciones en Khirbet Qeiyafa son muy probablemente del período helenístico, y la inscripción, así como parte de la cerámica, corresponde a un pequeño asentamiento de la Edad del Hierro I. No estamos ante una prueba de la existencia del Reino de David, en absoluto". Y, para que me hiciera a la idea del valor de la inscripción, me remitió al blog de Neil A. Silberman, coautor de La Biblia desenterrada, quien considera que estamos asistiendo, otra vez, al "espectáculo del fundamentalismo religioso disfrazándose de arqueología científica" y que la traducción del texto propuesta es "una fantasía que entusiasmará a los fieles y que demuestra poco más que la habilidad de Galil a la hora de hacer crucigramas". Silberman advierte de que hay otra primera"que da una mejor idea de la magnitud de la incertidumbre de la reconstrucción":

1 No hagas [¿algo malo?] y sirve a [¿nombre de persona?]
2 gobernante de [¿nombre geográfico?]... gobernante...
3 [¿nombres geográficos?]...
4 [irreconocible] y siembra el juicio sobre YsD rey de Gath...
5 seren de G[¿aza?]... [irreconocible]...

"Basta ver el dibujo [de la inscripción] que presenta Galil para darse cuenta de la extensión que alcanzan las letras dudosas o inexistentes, representadas como perfiladas. ¿Ciencia? ¿O test de Rorschach epigráfico?", se pregunta retóricamente Silberman.

¿Qué nos queda después de todo? Una inscripción de hace 3.000 años, descubierta en una aldea de la época que luego se fortificó durante el período helenístico, y que no se sabe qué dice. ¿Y la conexión con la Biblia, con David, Salomón, Goliat...? Pues la misma que la de los círculos del cereal con visitantes de otros mundos. Pero el fundamentalismo religioso y político judío necesita que el Antiguo Testamento sea históricamente cierto para justificar sus pretensiones y, como cualquier otro nacionalismo, no tiene reparos a la hora de manipular la Historia.

Fuente: Magonia.

lunes, 25 de enero de 2010

Lecturas: El Acuario Tropical


Siempre, pero siempre, tengo que comprar un libro de acuarismo cuando lo veo. Más si lo veo en una feria de usados. Y mucho más si el autor es un referente en la materia (y en Argentina), como Hugo Martty.
Libro de consulta básico, me sirvió de repaso, aunque tiene algunas ideitas nuevas que no había leido antes. Eso sí, la parte final, de reproducción, es excelente. Se dedica especialmente a los Danios (cebritas) y a las colisas y trichos.
Muy bonito.

Seguimos en la camioneta.

viernes, 22 de enero de 2010

Telepredicador evangelista norteamericano: los haitianos pactaron con el Diablo


Pat Robertson es en EEUU un (muy) famoso telepredicador evangelista, aparentemente bastante influyente entre los cristianos conservadores de ese país. Entre sus legendarias citas cabe destacar cuando llamó a la religión islámica "una secta satánica" o cuando dijo en su programa "The 700 Club" que había que matar al Presidente Hugo Chávez.
(Casi como blanquear la política exterior norteamericana de la segunda mitad del s. XX).

Pero esta vez se superó a sí mismo al explicar en su programa que la causa del terremoto en Haití es un pacto con el Diablo que los haitianos hicieran para liberarse de los franceses en el siglo XIX. A eso se deben, según él, todas las desgracias y miserias que históricamente atravesó esa nación.
Esto dice mucho de los evangelistas, de los fundamentalistas religiosos, del pensamiento mágico, y también del propio pueblo norteamericano (Robertson fue precandidato a presidente de EEUU).
Pego el video subtitulado con la infame declaración.


miércoles, 20 de enero de 2010

Las condiciones para ser feliz


Hace muchísimos años leí los cuentos de Edgar Allan Poe, en la traducción de Julio Cortázar. Están en esa antología todos sus cuentos, todos ellos.
Algunos son muy poco conocidos. En uno de ellos, llamado "El dominio de Arnheim, o el jardín-paisaje" uno de los personajes enumera lo que considera las tres condiciones para la felicidad.
Nunca las olvidé, y siempre consideré que eran palabras de Poe en boca de un personaje, pero palabras de Poe al fin.
Este personaje, cuyo nombre no recuerdo, dice que hay tres condiciones insustituibles para que un ser humano sea feliz. Las cito de memoria:

1) El ejercicio al aire libre.
2) El amor de la mujer.
3) La persecución incesante de un objeto. El grado de felicidad será directamente proporcional a la inmaterialidad de ese objeto.


Con respecto a la primera, creo que no hay mucho que aclarar. Creo que es muy interesante, en sus dos componentes: el ejercicio, por un lado, y el "aire libre", por otro. Piénsenlo: tiene muchas implicancias.
La segunda es súper machista, pero bueno, Poe vivió en la primera mitad del siglo XIX... y los personajes que dialogan en el cuento son caballeros victorianos que ni se habían enterado de cualquier atisbo de igualdad entre los sexos. Creo que no sería grave si cambiamos esta condición de la felicidad por "El amor de una pareja".
La tercera es lo que le da profundidad al listado. Según yo la entiendo, se refiere a búsquedas personales, a objetivos, a pasiones. Y según ese punto, será más feliz quien se dedique a, no sé, armar apasionadamente rompezabezas, que quien busque solo ganar dinero.

Todo esto es complejo pero a la vez simple. Yo no puedo dar otra definición que la precedente, porque lo leí de muy joven y tiñó mi punto de vista.

viernes, 15 de enero de 2010

Dará la vuelta al mundo en caballo


Rubén Gama, un apuesto mozo alicantino, coincidiendo con su trigésimo cumpleaños, el próximo 28 de agosto de 2010 saldrá a dar la vuelta al mundo en caballo. Según sus estimaciones en cuatro años y medio volverá a estar en casa después de haber pasado por los 5 continentes. Lleva 9 años preparándose en condiciones de calor y frio extremo para poder decirle al mundo "que es posible vivir alejado del materialismo y consumismo que nos rodean, que es posible vivir en concordancia absoluta con la naturaleza; a otra velocidad..., que es posible no acabar con el planeta que nos sustenta".
Fuente: http://www.elperroflaco.com

martes, 5 de enero de 2010

El caso James Miller


John Sweeney es un reportero de la BBC que colaboró con James Miller en Chechenia, Kosovo y Zimbabwe. Fue James quien enseñó a los hijos de Sweeney a hacer surf. Este último escribió este artículo para la Asociación Mundial de Periódicos

James Miller - posiblemente el más destacado realizador de documentales de su generación - fue muerto de un balazo el 2 de mayo de 2003 mientras iluminaba una bandera blanca con una linterna gritando "Somos periodistas británicos", al avanzar junto con dos colegas hacia un vehículo blindado israelí.

Dos años más tarde, el gobierno israelí anunció que el oficial responsable del asesinato de James fue inculpado simplemente por haber infringido reglas de combate, un veredicto que la viuda del cineasta, Sophy, califica de "indignante". James había estado en Rafah, la zona posiblemente más peligrosa de la franja de Gaza, desde hacía más de dos semanas, alojado la mayor parte del tiempo en una residencia privada que la Fuerza de Defensa Israelí (FDI) llamaba “la casa de los periodistas". En la última noche del rodaje se habían disparado tiros, principal o exclusivamente procedentes de vehículos blindados que transportaban a militares israelíes y destinados a blancos palestinos.

Tras un prolongado período de calma, los ocupantes de los vehículos blindados se dirigieron verbalmente a James y a su reportero Saira Shah, quienes realizaron juntos en Afganistán dos películas muy exitosas y premiadas repetidas veces. En las imágenes registradas por la cámara de James, se constata que las tropas israelíes los interpelaron no en hebreo sino en árabe, por lo cual se cree que se trataba de una unidad beduina de patrulla del desierto, compuesta por voluntarios árabes que trabajan a sueldo para los israelíes. Los beduinos no son reservistas israelíes inexperimentados sino combatientes endurecidos que se pasan largos períodos apostados en Rafah.

Preguntaron en árabe: "¿Les gusta Fairuz?" (una cantante folklórica libanesa) y: "¿Usan perfume?" (una frase popular de una serie televisiva egipcia). Según Saira Shah, su manera informal de hablar le hizo pensar que podrían estar bajo el efecto de narcóticos o algo parecido. Dos cámaras filmaron la escena: la de James y la de un corresponsal palestino contratado por la agencia Associated Press TV News (APTN).

Los dos vehículos que habían estado patrullando la zona apagaron los motores y los faros. Se trata de una conocida treta militar: al apagar las luces en la oscuridad, aumenta notablemente la visibilidad nocturna natural y se puede ver a los demás sin ser visto. Por otra parte, gracias a la ayuda militar norteamericana, la FDI está dotada de los mejores equipos de visibilidad nocturna. Los vehículos blindados en Rafah transportan generalmente dos rifles equipados con miras nocturnas que atraen la luz disponible y cuadruplican la visibilidad. James y su equipo estaban instalados en una veranda bien iluminada. Entre la visibilidad nocturna natural y las miras nocturnas especiales, los soldados del vehículo blindando no podían dejar de verlos con claridad y nitidez.

El informe oficial de la FDI sobre la muerte de James es de carácter confidencial, pero ha circulado una versión filtrada donde se nota claramente que, tras algunos tiroteos, volvió a instaurarse la calma nocturna. James había estado filmando con la esperanza de registrar imágenes de los israelíes dinamitando una de las casas abandonadas en el límite de la franja de la muerte, pero aparentemente la FDI había cesado su actividad durante la noche. El equipo decidió dejar la casa desde donde había estado filmando para regresar al amparo mucho mayor de su apartamento en el centro de Rafah. Era el último día de rodaje.

Al divisar los vehículos blindados, decidieron adoptar una actitud natural y abierta, y acercarse directamente para que les permitieran pasar sin impedimentos. James, Saira y su asistente local Aboud se dirigieron en línea recta hacia el vehículo, gritando en inglés y en árabe. Saira llevaba en la mano un pasaporte británico, mientras que Aboud exhibía una bandera blanca iluminada por James con una linterna. El camarógrafo de la APTN filmó la escena desde la veranda. En la filmación se escucha claramente un silencio sepulcral, sin el menor ruido de tiroteo. De haberlo habido, el equipo no se hubiera arriesgado.

Habían caminado unos 20 metros desde la veranda cuando sonó el primer disparo. El grupo se quedó paralizado. Durante 13 segundos, lo único que se escucha en medio del silencio es el grito de Saira: "Somos periodistas británicos". Acto seguido, se oye un segundo balazo que acierta a James en el cuello, matándolo. El proyectil provino de un arma israelí y según un experto forense, fue disparado desde una distancia inferior a los 200 metros. Inmediatamente después de los tiros, la FDI declaró que James había recibido un balazo en la espalda durante un tiroteo. Más tarde, se retractó con respecto a esta información errónea del balazo por detrás. Todos los testigos no integrantes de la FDI declararon unánimemente que no hubo ningún tiroteo, hecho que confirma la cinta grabada por el periodista de la APTN.

Dos años más tarde, la FDI acaba de anunciar que el oficial israelí responsable, cuya identidad no se ha revelado, disparó contra James porque una hora y media antes había visto a un terrorista armado con un Kalasknikov. El oficial reconoció que había reinado la calma durante la media hora precedente al hecho, pero declaró no haber visto a James, por lo cual se habría tratado de un accidente. Sophy Miller dijo que la familia iba a demandar al ejército israelí por daños y perjuicios y a pedir una revisión legal del fallo de no inculpación por asesinato. "Es escandaloso que tras dos años de espera, el resultado sea nulo", declaró la señora Miller.

"Presentaron las cosas como si hubieran hecho todo lo posible por establecer la verdad, por hacer las indagaciones necesarias, pero fueron incapaces de suministrar siquiera pruebas fiables de la noche en la que James fue abatido". La familia Miller califica de asesinato el hecho y acusa al ejército de ignorar, destruir o sabotear las pruebas.

Se demoraron 11 semanas en inspeccionar las armas de los soldados que estaban dentro del vehículo, y se sospecha que dichas armas pudieron haber sido permutadas en el ínterin. Según la FDI, no se podía acusar al oficial de un delito más grave por falta de pruebas balísticas. Sophy Miller declaró que: "En la noche del asesinato, había una unidad militar entera que conocía la identidad del autor del crimen. Si se hubiera querido realmente saber la verdad, hubieran pedido las armas a los soldados esa misma noche y no un mes más tarde.

"Y ahora vienen con que no se puede juzgar al responsable por falta de pruebas balísticas. ¿Qué conclusión puede uno sacar de esto?"

La familia Miller se encontró en Tel Aviv con el abogado defensor, Brigadier General Avichai Mandelblit, quien admitió que la versión del teniente carecía de fundamento y que los soldados estaban enterados de la presencia de periodistas cuando se produjeron los disparos. Pero según Gen Mandelblit, el ejército estaba dispuesto a tomar medidas disciplinarias contra el teniente sólo por infringir reglas de combate y "por su conducta durante la investigación", una manera eufemística de reconocer que mintió a los investigadores.

Según Sophy Miller, los investigadores militares manifestaron una fuerte sospecha de que el teniente era culpable del homicidio ilegal de su marido. "Todavía hay fiscales que sospecharon y siguen sospechando de este oficial del ejército, contra el que sólo se han adoptado ciertas medidas disciplinarias basadas en una investigación viciada desde el inicio", añadió la señora Miller .

Un equipo de la BBC que está investigando la muerte de James mostró la filmación de la APTN a un soldado israelí de servicio, quien declaró que los miembros del equipo no tenían aspecto de terroristas islámicos y concluyó: "Aquello fue un asesinato".

Fuente: Wan Press.